Morfología: Definición y alcance.

Como hemos visto en el primer capítulo, la morfología es una rama de la lingüística que se ocupa del estudio de las formas y estructuras de las palabras en un idioma. En este curso, nos centraremos en el español, pero también haremos comparaciones con el inglés para ver cómo estas lenguas, a pesar de ser diferentes, pueden usar los mismos mecanismos.

La morfología se encarga de analiza y estudiar cómo se construyen las palabras. Tenemos que entender, para esto, qué es una palabra.

Desde el punto de vista morfológico, una palabra es una unidad lingüística con significado que puede existir de manera independiente. Es decir, es una unidad que conlleva un significado y que se puede pronunciar de forma aislada. Cuando leemos un texto, vemos que una palabra es lo que está entre espacios. El concepto de palabra es el concepto lingüístico más fácil de comprender por las personas que no tienen conocimiento lingüístico.

Palabras independientes vs. palabras morfológicas:

Las palabras independientes son lo que hemos visto en el párrafo anterior: una unidad lingüística con significado que puede existir de manera independiente, es decir, lo que está entre espacio y espacio (o entre silencios, si nos centramos en el habla). Pero si nos fijamos con atención, vemos que podemos encontrar palabras independientes que están formadas por varias palabras morfológicas, es decir el significado no es una idea única. En este caso, lo que vemos es una palabra física (lo que hay entre dos espacios) pero que, por cuestiones de orden de las palabras en la oración, realmente son dos o más palabras morfológicas (raíces independientes). Por ejemplo: Se lo voy a dar vs. Voy a dárselo.

Si no paramos a analizar estas dos oraciones, vemos que a pesar de tener diferente número de palabras físicas (5 vs. 3) el número de ideas independientes es el mismo: Se + lo+ voy+a+dar vs. Voy+a+dar+se+lo.

Vamos a ver si esta diferenciación entre palabras independientes y palabras morfológicas está clara:

¿Cómo se forman las palabras?

Al hablar de palabras morfológicas, ya hemos podido ver que las palabras pueden juntarse o modificarse para expresar significado. Esto, expresar significado, es fundamental para entender cómo las palabras se forman a partir de unidades más pequeñas llamadas morfemas. Este concepto es la base de la morfología. Los morfemas son las unidades mínimas con significado en una lengua.

Una palabra puede estar formada únicamente por una raíz, como “casa” o “comer”, o puede contener uno o varios afijos que se agregan a la raíz para modificar su significado o función gramatical, como en “casita” (casa + sufijo diminutivo -ita) o “comiendo” (comer + sufijo gerundio -iendo).

Los morfemas se clasifican en raíz, o afijo:

• Una raíz aporta el significado básico de una palabra.

• Un afijo se une a la raíz para modificar su significado o su función gramatical. A su vez, los afijos pueden diferenciarse entre prefijos (que se colocan antes de la raíz), sufijos (que se colocan después de la raíz).

Podemos utilizar las piezas de Lego como ejemplo visual de lo que son los morfemas: